Capítulo 7.6

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El momento en que la pelea terminó, Henri se desplomó en el piso.

La fuerza se le había ido completamente del cuerpo. Aunque sabía que aún era demasiado pronto para sentirse aliviada, una pesada sensación de fatiga la superó. La estaba tan silenciosa que dañaba los oídos— pero justo mientras pensaba eso,

“¡Raishin! ¡¿Estás bien?!”

El silencio se rompió rápidamente por parte de Yaya.

Echando un vistazo, vio que Raishin yacía en el suelo, sin moverse en absoluto.

Era una situación peligrosa. Antes de que Henri pudiera ponerse de pie, Charl ya se había acercado a él. De pie detrás de una sollozante Yaya, Charl tímidamente preguntó,

“Bueno… ¿Aún sigues vivo?”

Agudizando sus oídos, una voz apenas más fuerte que el zumbido de un mosquito pudo escucharse.

“…De alguna manera… supongo.”

“H-Hmph. No es como si estuviera particularmente preocupada ni nada. Ya que no eres más que un pervertido cuyo único punto a favor es tu resistencia.”

Henri soltó un suspiro de alivio, la tensión empezaba a disiparse.

Frey le dio un empujoncito a Henri, señalando a Charl. Diciéndole “Ve”, Frey le dio un empujón más fuerte a Henri para que se moviera. Aunque era lo último que Henri quería hacer en ese momento, no podía negarse, y así Henri tímidamente caminó hacia su hermana.”

“Hermana…”

Su voz iba cargada de titubeo. Charl ya había notado su presencia, tal parece. Sin voltear a verla, Charl siguió hablándole a Henri dándole la espalda.

“Lo siento, Henri.”

“¿Eh…?”

“Es verdad… puede que me haya sentido un poco superior cuando estaba contigo. Puede que me haya sentido más segura cuando tú estabas a mi alrededor.”

¿Qué es esto? ¿Alguien le dijo algo a ella?

“Pero lo que quiero que sepas que me sentía inferior a ti a mi propia manera.”

“Eh… ¿Inferior a mí?”

Henri estaba atónita. Este era un sorprendente giro de eventos.

En términos de apariencia, inteligencia y potencial mágico, Charl estaba muy por encima de Henri.

Charl le echó un vistazo de reojo a Henri, con nervios como si las próxima palabras que iba a decir fueran difíciles de admitir.

“Tú eres… una pulgada más grande, ¿no?”

“¿Nuestra altura…? Pero tenemos la misma altura.”

“…echos.”

“¿Eh?”

“¡Dije los pechos!”

La punta de las orejas de Charl se pusieron muy rojas.

“¡Noooo! ¡Me prometí que nunca admitiría eso en toda mi vida!”

Charl apartó su rostro sonrojado, antes de notar a Raishin y explotar del enfado.

“¡¿Qué estás mirando?! ¡Por qué sigues aquí, pervertido!”

“¡Uwaah, no me patees, idiota! ¡Me romperás algo!”

No me digas que escuchaste todo… ¡Sigmund! ¡Reduce a polvo a este idiota!”

“Cálmate, Charl. Esto va a ser difícil de decir, pero tu secreto— el hecho de que usas relleno— ya se sabía desde hace mucho tiempo.”

Viendo su conversación, una pequeña risita escapó de los labios de Henri.

Risita, risita.

“Ya veo… así que a eso se refería mi hermana, ¿huh…?”

“¡¿Por qué te estás riendo?! ¡Geez!”

Charl se estaba enfadando mucho, pero eventualmente se contagió de Henri y comenzaron a reírse juntas.

Siempre había pensado que su hermana mayor era perfecta, pero ahora Henri aprendió que su hermana también tenía defectos.

Para un humano, la envidia y los celos eran emociones naturales.

Mi hermana es como yo. Un ser humano.

La presión en su corazón empezó a desenredarse. Era como si los primeros rayos glorioso del sol de primavera derritieran los últimos restos de la nieve del invierno.

A pesar de que soy así, seguramente haya alguna parte de mí que es más fantástica que Charl.

Obviamente, eso no se restringía sólo a un pecho plano.

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La que le enseñó eso fue Raishin.

Raishin estaba siendo asistido por Yaya, y su rostro estaba manchado de sangre, pero para Henri ese rostro lucía muy brillante.

Ella le temía a los hombres, pero parece que Raishin podía ser la excepción.

(Gracias, Raishin. Un día, yo también…)

Fue apenas una pequeña fracción, pero comenzó a agradarse a sí misma un poco.

Rayos de luz naranja estaban empezaron a fluir entre los espacios de los árboles. Pequeñas aves comenzaron con su ruidoso coro, señalando el inicio de un nuevo día.

 

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