Capítulo 3.5
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“Esta es la habitación de Frey.”
Yomi guió a Raishin y Komurasaki hasta el segundo piso del orfanato.
El segundo piso constaba de pequeñas habitaciones alineadas de forma ordenada, muy parecido a un dormitorio para estudiantes. Parece que la habitación del sudeste era la de Frey.
Abriendo la puerta, Komurasaki dio un paso dentro y dijo “Wow~” con asombro en su voz.
Había una fotografía pegada en una pared.
Era una fotografía de un chico animado y una chica sonriente. También había una pareja de casados sonriendo dulcemente.
Raishin se enfocó en la chica. Estaba sonriendo con inocencia. Era Frey mucho tiempo antes de que Raishin la conociera. Allí su rostro estaba lleno de alegría, era una mirada que él no podría imaginarse en la Frey de ahora. No había rastros de miedo en su cara en absoluto.
Era natural que Frey pudiera sonreír, todos los humanos podían. Pero irónicamente, tan pronto como Raishin quedó impactado al ver que ella podía sonreír en verdad, se acordó del hecho de que la Frey de ahora nunca sonreía.
Familia. Algo que Raishin había perdido. Se la habían arrebatado.
Y Frey también había perdido a su familia.
Los hermanos en la fotografía eran muy pequeños. Esta foto probablemente fue tomada antes de que ingresaran al orfanato.
“Los padres de Frey eran titiriteros extremadamente habilidosos… o eso escuché.”
Yomi habló con un poco de tristeza en su voz mientras veía la foto.
“Estaban en una tropa Americana que realizaba espectáculos con títeres para el público.”
“… ¿Frey es su verdadero nombre?”
“No, es su código de identificación. Le fue dado cuando vino aquí. Aunque no conozco su verdadero nombre.”
“¿Cómo murieron sus padres?”
“Perdieron el control del autómata que estaban manejando, y que luego enloqueció. Esto pasó en el medio de un show. El público quedó bañado en la sangre de la madre.”
“… ¿Frey te lo dijo?”
Yomi asintió en silencio confirmándolo.
Komurasaki se cubrió la boca con las manos. Sus ojos se pusieron gradualmente húmedos y temblaron, con lágrimas formándose en ellos.
Que una chica tan inocente presencie un accidente tan trágico de primera mano; Raishin se quedó sin palabras.
Su mente reprodujo un flashback de su pasado. El mar de sangre y fuego. Y luego su sensación de pérdida. ¿Frey estaba soportando el mismo dolor por el que él pasó…?
“No conozco los detalles ni nada sobre ella tratando de matarte… pero afortunada o desafortunadamente para ella, Frey siempre ha sido una buena chica.”
Yomi le dijo solemnemente a Raishin.
“Siempre fue buena con nosotros. Todos los días, pasaba su preciado tiempo libre peinando nuestro pelaje. Habiendo tenido nada más que pastillas nutritivas toda nuestra vida, ella nos alimentaba con carne.”
El pelo de Yomi estaba crispado, y no tenía brillo alguno.
En otras palabras, no había nadie en estas instalaciones responsable de peinarles el pelaje.
“Por supuesto que todos la amaban. Sin embargo debido a eso, terminó siendo elegida.”
“… ¿Para ser la ama de Rabi?”
“Así es. Pasó por unas cinco mil horas de lecciones y práctica antes de finalmente entrar a la academia.”
Cinco mil horas en un año no era broma. Raishin no podía imaginar pasar por un período tan largo de tiempo.
“… Todavía no sé si todas esas pruebas fueron algo afortunado o desafortunado para ella.”
Raishin miró a la chica en la foto, grabando la imagen de esa sonrisa en su retina, antes de preguntarle a Yomi.
“No creo que sea algo malo. Después de todo, alguien como tú estaba cerca, así que al menos tuvo una buena familia.”
Los ojos de Yomi se abrieron grandes antes de reír ligeramente.
Hombres en bata blanca subían y bajaban por el pasillo en el que Raishin y las demás estaban atravesando cautelosamente.
El próximo lugar al que Yomi los llevó era el primer piso de un edificio distinto. Era el que tenía barrotes de acero en las ventanas.
El interior del edificio emanaba la misma atmósfera que la escuela. Había grandes salas que parecían ser salones de clases junto con pizarrones instalados en las paredes e incluso un campo para Educación Física.
En el medio de lo que parecía ser el salón comedor de la escuela, una vista increíble recibió a los ojos de Raishin.
“No mentían cuando dijeron que era un orfanato… Pero aun así…”
Sudor frío se formó en su piel y miró en los alrededores del salón.
(¡¿Qué demonios sucede aquí…?!)
Los chicos estaban sentados lado a lado en filas, consumiendo sistemáticamente su comida. Pan y sopa. Una ensalada y carne parecían ser el menú del día. Nadie estaba hablando y los chicos en silencio cargaban su comida como un montón de robots.
Todos los chicos tenían una peculiaridad.
Todos tenían cabello perla y pupilas rojas.
¡Eran exactamente iguales a Frey y Loki!
“Me gustaría decir que todos son hermanos… pero algo como eso es imposible.”
Aunque tenían el mismo color de cabello y ojos, sus rostros y cuerpos eran distintos.
Frey y Loki se parecían entre sí. Sin embargo no se parecían a ninguno de los chicos de aquí. Además, no aparecían en la fotografía de la habitación de Frey. Era altamente improbable que estuvieran relacionados por sangre con ella.
¿Una raza separada entonces? ¿O un grupo étnico específico?
¿O este era un lugar para reunir a un grupo específico…?
No, probablemente no era eso. ¡No había manera de que algo como esto pudiera pasar tan convenientemente!
“Ellos son los Niños Prometidos.”
Yomi respondió a las dudas de Raishin.
Era la primera vez que escuchaba un término como ese. Yomi estaba sorprendida por la mirada perdida en el rostro de Raishin,
“Nunca pensé que habría una persona en la academia que no conozca lo que son. Entre la raza humana, están aquellos con una afinidad fuerte con la energía mágica. Por cada cien mil bebés, sólo uno nacerá.”
“Oye… ¿No era esto un orfanato?”
“Son todos huérfanos, no hay duda de ello. Fueron reunidos de todas partes de— Bretaña, el continente y desde tan lejos como el subcontinente de la India.”
“Aun así, se supone que son uno-en-cien-mil, y que tantos estén convenientemente en un orfanato…”
“No son los auténticos… ¿es lo que quieres decir?”
“¡…!”
¿Era realmente ese el caso entonces?
Komurasaki estaba mirando perpleja, pero Raishin ya había empezado a entender.
¿Pero podía hacerse algo como eso?
¿Era posible? ¿Estaba permitido incluso?
Dándoles la espalda, Yomi dijo en voz baja y tenue.
“Vamos. Hay algo más repulsivo que quiero mostrarles.”
Bajando por una serie de escaleras sombrías, descendieron hasta el subterráneo.
El aire húmedo enfriaba sus pulmones. Había un extraño olor a sangre en el aire que causaba una sensación de náuseas en el pecho.
Raishin notó que Komurasaki se estaba retrasando ligeramente detrás de él.
“¿Qué sucede, Komurasaki?”
“Yo… estoy un poco asustada.”
Sus pequeños hombros estaban temblando. Lucía como si tuviera alguna clase de premonición maldita.
“Perdón por esto, pero sabes que no puedes regresar por ti sola.”
Extendió su mano y tomo la de ella.
“Vamos, estoy contigo. Si estás muy asustada, sólo cierra los ojos.”
“Ok… Gracias. Creo que me siento un poco más valiente ahora. Porque estoy junto a Raishin.”
Sosteniéndose de las manos, siguieron a Yomi.
Un Doberman bastante feroz estaba sentado en el medio de la escalera, haciendo guardia.
Si les clava los dientes seguro estarán en las últimas… pero el Doberman no reaccionó ante ellos. Parece que no poseía la habilidad de encender su censor activo. Al igual que Rabi, parece que sólo poseía la inteligencia de un perro ordinario.
“Lo que yace frente a nosotros es la parte más importante de estas instalaciones. Ni siquiera los miembros del staff tienen permitido entrar.”
Yomi bajó el último escalón. Al final de las escaleras estaba ubicada una gran puerta de hierro.
Conforme se acercaron, un estallido cortante de aire frío los golpeó.
Probablemente era una cámara refrigerante… o algo.
El hielo y la nieve del invierno podrían reproducirse y mantenerse a través de artes mágicas. La actual tendencia era una combinación de circulación de la atmósfera adentro combinada con un intenso aislamiento en el exterior que probaba ser efectivo.
Por lo que podían ver desde la puerta misma, este lugar estaba diseñado para ser hermético. La construcción también era relativamente moderna. La temperatura interior probablemente estaba en el punto de congelamiento.
Raishin buscó otra vez en su estuche, sacó sus ganzúas y demás herramientas y comenzó a trabajar en la puerta.
Trabajando en silencio, logró abrir la puerta.
Respirar el aire extremadamente frío hacía doler su nariz. Allí dentro, estaba tan frío que empezó a temblar. Estaba tan frío que podía sentir como su piel se ponía seca y tensa. Como pensó, este lugar era un freezer.
“¿Qué lugar es este?”
“Un almacén donde guardan carne.”
Yomi respondió, pero no podían verla. El interior de la cámara refrigerante estaba muy oscuro.
“Cualquier clase de luz aquí atraería la atención. Tendrán que esperar y adaptarse a la oscuridad.”
Komurasaki se estaba aferrando con fuerza a la espalda de Raishin, presionando su pequeña contextura contra su cuerpo. Gradualmente sus ojos empezaron a ajustarse a la oscuridad. La luz se estaba filtrando desde algún lugar y la cosa detrás de él gradualmente salió a la vista.
“¡…!”
Dejó escapar un alarido inconscientemente. Parada junto a él, Komurasaki estaba aturdida.
Había contenedores de vidrio ubicados en filas.
Llenos de anticongelante, lo que estaba flotando en medio de la maquinaria dentro de ellos eran-
Brazos.
Piernas.
Todos tenían tamaño pequeño. Delgados. Todavía no habían madurado.
Eran los cuerpos de un gran número de niños.
“¡¿Qué… demonios… es esto?!”
Ciertamente era una pregunta muy estúpida para hacer. Podía sentir la bilis subiendo por su garganta. Incluso para Raishin, esto era demasiado para soportar. En el momento en que volteó, una aguda campana sonó y hubo algo de ruido del otro lado de la puerta.
“¡Raishin! ¡Se oyen un montón de pasos dirigiéndose hacia aquí!”
Komurasaki le gritó con una voz urgente.
Traductor al Inglés: Hayashi (Nanodesu Translations)
Traductor al Español: nahucirujano
Corrección: nahucirujano
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